Esta noche es la noche de San Juan. Para muchos la noche más mágica y una de las más cortas del año. Para nosotras, en nuestra memoria es sinónimo de moragas, júas, fin de exámenes y alguna que otra borrachera (ups!). Pero eso era otra época. Ahora no tenemos apuntes que quemar. Por eso hemos hecho el ejercicio de pensar qué cosas quemaríamos en la hoguera y este es el resultado.

1. Las medias transparentes. Ya sabemos que la princesa Kate es una fan de estas medias, pero ni con el tinte real están justificadas y su pecado no tiene absolución posible. Se merecen muy mucho ir a la hoguera.

2. Los capullos. Señoras, hay muchos capullos sueltos, están entre nosotros y nadie hace nada. Con capullos nos referimos tanto a los especímenes que te sueltan «acabo de salir de una relación complicada» como a todos los que dedican su energía a consumirte la tuya. A todos ellos los mandaríamos a la hoguera para que se asasen cuál rollo de kebap.

3. El escote masculino. Decimos un no rotundo a esos chicos que enseñan más pechuga que tú. No tiene ninguna justificación, no eres (ni queremos) tronista de Hombres, Mujeres y viceversa. Todas las camisetas con escote, a la hoguera que van.

4. El gotelé. Deberían activar una oficina de afectados por el gotelé. Esa casa perfecta con la que soñabas, todo inmaculado y…zasca, gotelé que te crié. ¿Quién inventó el gotelé? ¿Por qué no está en la lista de los más buscados? Mientras lo encontramos, queremos dejar atrás cualquier recuerdo de gotelé y quemarlo a fuego lento, que diría Rosana.

5. Los broches de fieltro. Que sí, que no vamos a renegar de nuestro pasado, nosotras también hicimos broches de fieltro sin parar, no había personaje, figura ni filigrana que se nos resistiese, pero ya está. Ya terminó. Hemos madurado y aprendido que los broches de fieltro son cosa del pasado. Por eso, el fieltro y los ojitos de mentira, todos ellos, ¡a la hoguera!

Son sólo cinco cosas, aunque si nos ponemos no paramos y la lista sería eterna. Lo bueno de todo esto es que cuando quemas las cosas malas, arden y sólo pueden surgir cosas buenas, mejores y sobre todo, más bonitistas. Y vosotros, ¿qué mandaríais a la hoguera?

¡Feliz martes y feliz noche de San Juan!