Si ayer os decíamos que no hay verano sin colchoneta, hoy sumamos algo más a la lista. No hay verano sin un libro con el que compartir toalla. Con permiso de nuestros seres queridos, no hay mejor compañía para las horas en la piscina, playa, viajes que uno de esos libros en los que perderte. Libros que devoras como si fuese un amor de verano. Por eso hoy, os dejamos nuestro top ten de humildes lectoras (no somos Sánchez Dragó) de libros con los que pasar este verano.
La verdad sobre el caso Harry Quebert . Uno de esos thrillers -amables- que te enganchan y no te sueltan hasta que lo terminas.
Hacia rutas salvajes Este libro nos gusta tanto, que le dedicamos un post completo. Y no nos importa repetir verano con él y escaparnos de nuevo hasta Alaska con el gran Alexander Supertramp. Está basado en la historia real de Christian McCandless, un joven que lo dejó todo por sus ganas de vivir y de recuperar el contacto con la naturaleza. Encontró un final trágico en Alaska y el periodista Jon Krakauer recorre los pasos y las razones de este joven aventurero.
Middlesex. «Nací dos veces: Fui niña primero, en un increíble día sin niebla tóxica de Detroit, en enero de 1960; y chico después, en una sala de urgencias cerca de Petoskey, Michigan, en agosto de 1974». Así empieza esta maravilla de novela (novelón) que cuenta una historia familiar de varias generaciones.
Cómo ser mujer Desde el humor y su mordaz punto de vista, la gran Caitlin Moran da una lección sobre el feminismo. Un libro capaz de hacerte reír y de reflexionar al mismo tiempo.
Patria. El gran éxito desde 2016. Con él hemos empezado el verano y aunque aún no nos hemos despedido -no nos queda mucho-, ya lo estamos echando de menos. Una gozada de libro sobre el conflicto vasco que maravilla por su estructura (sus capítulos cortos son adictivos) y su capacidad de profundizar en cada uno de los personajes de forma que seas capaz de entender todos los puntos de vista.
Dime quién soy. La historia de Amelia Garaoya, un personaje cuya vida transcurre paralela a los grandes acontecimientos del siglo XX, no te dejará dormir ni siesta ni por la noche.
Océano Mar . Poesía hecha novela. Imaginación capaz de llevarte a un extraño lugar en el que conviven personajes fantásticos. Un cuento profundo para adultos intensitos (como yo).
Pureza . Hemos tenido dudas si recomendar Libertad o Pureza, ambas novelas de Jonathan Franzen igual de adictivas. Nos hemos decantado por esta última, porque tiene un punto más de tensión narrativa, pero ambas son maravillosas.
La flor púrpura. Conocí a Chimamanda Ngozie Adichie por su fabulosa charla TED «Todos deberíamos ser feministas» y poco después esta novela se cruzó en mi vida. La historia de una familia nigeriana, contada desde la perspectiva de una adolescente capaz de mezclar ternura con terror y miedo. Una historia que sucede en Nigeria, pero que podría haber ocurrido en la casa de la esquina. Su capacidad descriptiva es tan brutal que eres capaz de imaginar lugares que nunca habías visto.
Manual para señoras de la Limpieza. Confieso que aún no he compartido lecho con este libro, pero Celia sí y nos lo recomienda muy fuerte. Como son pequeñas historias, son ideales para hacer la digestión y la pausa entre chapuzón chapuzón.
Y tú, ¿con qué libros nos recomiendas compartir toalla, siesta y arrumacos este verano?
P.D. La foto de la toalla de fondo es de Bertha Hogar y no está incluida con ninguno de los libros.
Una reflexión sobre “10 libros con los que compartir toalla este verano”