Con este post me pasan dos cosas. Una: me imagino en uno de ellos en pleno terral (viento calurosísisisimo muy habitual en Málaga) veraniego. Dos: estos días estoy en la búsqueda de piso en Sevilla, no me mudo yo, se muda Mr. Bonitisto, y estoy viendo cada horror que este post es contraproducente. Aún así y pese a todo le decimos sí a los sofás y sillones de terciopelo.
En su formato sillón unipersonal o en formato sofá de varias plazas, el terciopelo aporta a la pieza más codiciada del invierno hogareño (quién se resiste a la manta y sofá estos días) un rollazo tremendo. Esta semana comenzábamos hablando de los toques rosa en casa y quizá el sofá rosa de terciopelo sea nuestro favorito. Aunque tampoco le ponemos mala cara a uno en verde o azul. Hemos visto uno en Pinterest de color mint… ¡flechazo absoluto!
Pinterest debería estar prohibido cuando estás buscando piso con fotos como la 1 // 2 // 3 // 4 // 5 // 6
Hemos visto que hay sofás similares a estos en Maison du Monde o Wetswing, pero claro, no son especialmente barato. ¿Qué lo es, no? Quizá una opción más económica y más viable sea de un pequeño sillón o butacón. Te quitas el gusanillo, le das ese rollo entre vintage y elegante al salón o habitación y pagas menos. Todos contentos. Aquí va otro «»chute» de inspiración terciopelil.
Visto en rosas 1 // 2 // 3 amarillos 1 // 2 // 3 colorines 1 // 2 // 3
Así que termino por hoy con unas cuantas cosas también:
Uno. Si alquiláis o conocéis de alguien con piso en alquiler en Sevilla (o alrededores) bueno, bonitista y barato… soy todo ojos y oídos.
Dos. Adoramos los sofás y sillones de terciopelo. Queremos renovar nuestra casa entera…¿eso no se puede hacer como el cambio de armario, verdad?
Tres. Eso sí, en verano… Málaga+terciopelo… mal asunto. Pero no hay nada que no solucione una sabanita por encima, ¿no?
A grandes males, grandes remedios. Juas juas juas.
¡Hasta mañana!
Muy bonitos, una pena que me den alergia…
Besitos!