Tengo que empezar este post confesando que ninguna de las tres se ha tatuado nunca. Pero como todo en esta vida, nunca digas nunca. Esto lo digo porque somos conscientes de que no tenemos mucha autoridad firmando este post, no nos hemos enfrentado (hasta ahora) a la aguja y la tinta, pero trataremos el tema en adelante poniéndonos en la situación lo más que podamos. De hecho, siempre pensé que si alguna vez me tatuaba sería con un algo grande y de colores… no es que me acabe de ver del todo, pero, siempre fue lo que tuve en la cabeza. Sin embargo, hoy os proponemos hablar de tatuajes que bien podrían ser el dibujo de un niño: tan pequeños como cuquis y que son aptos para todos los públicos.
Tatuajes que además de ser pequeños están realizados con cuatro trazos mal contados, líneas en negro que forman un pequeño dibujo en la piel y que lejos de ser llamativos… resultan más como una sorpresa en la anatomía de quien los luce. La verdad es que últimamente (también desde el post de ayer) me tienen enamorada y si sois unos indecisos como yo, este podría ser un acercamiento poco traumático.
A ver qué decís…
Vía 1 //2 // 3 // 4 // 5 // 6 // 7 // 8
Pero hay más, eh…
Vía 1 // 2 // 3 // 4 // 5 // 6 // 7 // 8
¿Tenéis tatuajes? ¿Os gusta la moda de los tatus pequeños y minimalistas? Si tenéis hijos, no es mala idea ponerlos a dibujar y a ver qué sale,¿no?
¡Hasta mañana!