Con el tormentón de ayer, el universo nos mandaba una poderosa señal: otoño is coming, amigos. Y en contra de todos los pronósticos, nosotras optimistas irremediables, le vemos su encanto a la nueva estación que llega y nos parece una buena época para dar el sí quiero. Igual para este año ya llegamos tarde, pero si te estás pensando eso de casarte y no sabes cuándo, esperamos que este post te muestre todas las oportunidades bonitistas que tienen las bodas en otoño.

Siempre hay que empezar por el principio: la invitación. El otoño con su paleta natural de colores ya es un acierto y si  además te atreves a combinar estos colores con otros que marquen el contraste, ya es amor puro.

Continuamos con el temido «y ¿qué me pongo?» El otoño invita a las coronas de flores secas para ella y a prendidos otoñales para él.

El otoño y una boda en otoño nos pide campo, ambiente boho y rústico, por eso nos enamoran estas ideas para la ceremonia.

Y después de la ceremonia llega el momento de la comilona, en las mesas no faltarán flores tan bonitas combinadas con una vajilla y una cristalería que nos den el contraste y la magia que buscamos.

Como un colofón a la boda no puede faltar el momento dulce, ya sea con tarta o con una sweet-table otoñal que quedan así de bien.

Nosotras hemos activado el modo otoño y ya estamos requete convencidas de que las bodas en otoño son bonitismo puro y duro. ¿Y tú?

¡Buen martes!