Hace un par de semanas estuvimos en la boda de una compañera de trabajo y nos enamoró toda su decoración. Desde las flores de la iglesia, pasando por las bolsitas de arroz, el seating, los meseros… Todos los detalles tenían un precioso toque invernal. Y por supuesto, la tarta de boda no podía ser menos. Una riquísima red velvet, coronada por dos ciervos y decorada en su base con hojas burdeos, el color de la boda.
¿No nos digáis que no es preciosa?
Pues después de ver (y probar) este maravilloso pastel, pensamos que era fundamental hacer un post de tartas de las bodas de invierno. Porque como ya sabéis, cada detalle suma y el postre, por supuesto, tampoco se puede descuidar.
Así que nuestras propuestas para la de decoración de una tarta de invierno son:
- Colocarla sobre una base de tronco de madera, para darle ese toque rústico.
- Utilizar hojas o ramitas de romero, pino, olivo… para decorar la propia tarta o la mesa en la que se colocará.
- Adornar el pastel con piñas o ciervos le da el toque perfecto.
Os dejamos un poco de inspiración:
Y por supuesto, también recomendamos no descuidar que esté buena. Además de bonita, los invitados tienen que quedarse con un buen sabor de boca.
¡Qué tengáis un bonito lunes!
Una reflexión sobre “Tartas para bodas de invierno”