Pablo ya es mayor. El tiempo ha pasado volando y, aunque nos dé penita reconocerlo, la realidad es que casi no cabe en su cunita convertida en cama. Por eso, ha llegado el momento de hacer algún que otro cambio en su habitación. Nos toca comprar una cama grande, fundas nuevas y algún que otro detalle. Y buscando un poco de inspiración en diversas tiendas nos hemos topado con la nueva colección de H&M kids y nos ha conquistado completamente.
habitación infantil
Hacks de Ikea para habitaciones infantiles
Seguimos a tope con la búsqueda de ideas para el cuarto de Pablo. Nos encantaría poner en él una cama chula en el suelo, una zona de juegos, otra de lectura… El problema es que tanto el espacio como el presupuesto son reducidos, así que hemos acudido a nuestro salvador Ikea y hemos encontrado algunos «hacks» de sus muebles que que nos pueden venir muy bien para darle nuestro toque personal a la habitación, sin gastarnos una millonada.
Compartimos las ideas con vosotros por si también os vienen bien:
- Cama Kura. Se puede convertir tanto en una cama baja para los primeros años del niño, como en una alta para más adelante. Además, forrada con unas telas bonitas, queda la mar de bien, ¿no os parece?
Imagen vía.
- Especiero BEKVÄM. Ya os contamos en este post que el especiero no solo valía para la cocina y hoy le vemos un nuevo uso para habitaciones infantiles. Podemos usarlo como estante para los juguetes, los libros o incluso, si le damos la vuelta, para colgar en él alguna de la ropita de los niños.
Imagen vista aquí.
- Mesa Latt. La clásica mesita de Ikea, pero con el rollo de papel continuo instalado en ella, para que los pequeños puedan pintar ahí sin parar. Además, en otro de los lados de la mesa se podemos colocar varios colgadores y poner en ellos cubiletes con los lápices de colores, ceras y demás material.
Diy visto aquí.
- Silla Latt. Otro «hackeo» que nos ha encantado es el de tapizar las sillitas Latt. Eligiendo una tela bonita que vaya con el cuarto, podemos conseguir un espacio de lectura y pintura muy chulo.
Podéis ver cómo tapizarlas en este post.
- Lámpara Miffy. Solo pintando en ella una cara bonita podemos conseguir que esta sosa lámparita sea perfecta para una habitación infantil.
Imagen vista aquí.
- Cesta Gaddis. Con un poco de pintura y unos pompones de los colores que mejor nos vengan, conseguiremos una preciosa cesta para guardar los juguetes de los peques.
Diy visto aquí.
Como veis, con algunos trucos sencillos podemos darle nuestro toque a los típicos muebles de Ikea y mejorarlos algo más. Y vosotros, ¿conocéis alguno más?
¡Hasta mañana bonitistas!
Habitaciones montessori para los más pequeños
Pablo se hace mayor y nos estamos planteando hacer algún que otro cambio en su habitación. Y de entre las miles de posibilidades que hay, nos encantan algunas cosas del estilo Montessori.
Para el que no lo sepa, éste es un método pedagógico que fomenta la independencia en el desarrollo del niño. Y en lo que respecta a la decoración, apuesta por un entorno sencillo y ordenado, donde todo sea muy accesible para él. Así que, siguiendo alguna de estas pautas, en una habitación Montessori no puede faltar:
- Camas bajitas. Colocándolas a ras del suelo, fomentan que el niño se acueste y se levante sin ayuda de un adulto.
- Espejo. Colocar uno a su altura para que pueda verse mientras juega. Esto le ayudará a reconocerse y a mejorar sus movimientos desde bien pequeñito.
- Organizadores. Cada cosa tiene su sitio y es muy importante que estos organizadores se encuentren también a su altura. Les ayudará a orientarse mejor y aportarles mayor seguridad dentro de su habitación.
- Láminas e ilustraciones en las paredes de la habitación. Sirve para estimular su curiosidad y creatividad.
Nosotros estamos deseando ya meterle mano a la habitación y empezar con algunas de estas ideas. Y a vosotros, ¿os convence el estilo Montessori?
¡Volvemos mañana bonitistas!
Vinilos y papel pintado para los más peques
Ya sabéis que no nos gustan nada las paredes vacías y si encima hablamos de las paredes del cuarto de los niños, pues mucho menos aún. Por eso hoy traemos una selección de vinilos y papeles pintados infantiles, perfectos para vestir y alegrar las habitaciones de los más peques.
- Comenzamos por los vinilos. Nos encantan porque son muy fáciles y rápidos de colocar. Además, si te cansas de ellos o quieres renovarlos, tampoco tiene la mayor complicación. Y por supuesto, hay montones de modelos de todos los colores y para todos los gustos. Os dejamos algunos de nuestros favoritos:
- Papel pintado. Es otra opción que también nos gusta mucho para decorar las paredes y, aunque es un poco más complicado de colocar, el resultado merece mucho la pena. Os dejamos algunos que nos han enamorado:
¿Qué os parecen estas ideas para el cuarto de los más peques? Una servidora a lo mejor se anima con unos vinilos de nubes para la habitación de Pablito. Ya os iremos contando…
¡Qué tengáis buen comienzo de semana!
DIY: un cojín para el bebé Emma
Emma está a punto de llegar y eso nos pone contentas. La mejor forma que se nos ocurre para celebrarlo es ponernos a imaginar, mirar ideas, pensar en algo que sea solo para ella, algo único hecho por nuestras manitas. Ya nos gustaría poder dedicarle horas a cualquier proyecto DIY pero, como es habitual, de tiempo andamos ‘justis’. Así que con todo este cóctel, llegó el cojín DIY para el bebé.
Compramos una tira para bordar a punto de cruz y elegimos esta simpática sandía que ya os enseñamos hace unas semanas en nuestro post dedicado al punto de cruz. Y por qué una sandía… pues porque Emma llegará en julio y queríamos huir de ñoñerías tipo pollitos, patitos y animalitos acabados en ‘ito’. Y luego el cojín… sencillísimo, no hacen falta (casi) dobladillos e incluso se podría hacer sin máquina, os recordamos el tutorial que hicimos hace un par de años ya (madre mía, se nota muuucho). Pero resumimos, con tres piezas de tela, está hecho!
Obviamente las medidas son completamente orientativas, una vez montado, ya sólo queda rellenar y nosotras además le pusimos a los datos estas bolitas en rosa (borlas, morillas, madroños… en cada sitio suponemos que se llamarán de una forma diferente). Y así, una noche en el sofá pensando en Emma, surgió este cojín que ya la está esperando en su flamante cuna.
Esperamos que os guste y si tenéis alguna duda, ya sabéis por dónde andamos 😉
¡Hasta mañana!020