Cuando era pequeña, como a tantas y tantas niñas, me hicieron mis agujeros en las orejas y hasta donde recuerdo siempre llevé pendientes. Los pendientes más clásicos empezaron a dejar hueco a otros más hippies y DIY. Cosas de la edad. Pero un día, no os puedo decir por qué, dejé de ponerme pendientes. De repente, esos adornos en mis orejas no eran yo. Así pasaron años y años (casi una década), hasta que para una boda, decidí calzarme unos.
Si a mí me dices «dinosaurio«, yo te respondo «Parque Jurásico». Es automático. Como muchos y muchas de vosotros, vi la peli de pequeña y me impactó tanto que durante mucho tiempo la teoría del mosquito dentro del ámbar me pareció de lo más verosímil y que incluso podía llegar a ocurrir. Recuerdo que en los años 90, a raíz de la película, los dinosaurios estaban muy de moda. Estaban por todas partes, incluso hasta se merecieron unas galletas (que a día de hoy siguen existiendo… alucino), en series, carpetas, estuches, juguetes y camisetas.
Tras este «dinoempacho», se dejaron de ver… se extinguieron (humor) de la faz de la tierra pero ¡ay! amigos que ya sabemos que las modas son cíclicas y que todo lo que fue vuelve a ser tarde o temprano y ya están por aquí. No paramos de ver dinosaurios en todas sus especies por todos sitios y esto nos ha llegado a preguntarnos… ¿son los dinosaurios los nuevos unicornios? Juzgad vosotros mismos.
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Es cierto que todo lo anteriormente visto tiene un cierto toque infantil, pero el unicornio también lo tiene y se ha convertido en todo un símbolo. ¿Cómo lo veis? ¿Le veis futuro al verde dinosaurio?
Buen miércoles… y hasta mañana.
Aún recuerdo cuando con 15 o 16 años intentaba convencer a mi madre de todas las formas posibles de que me quería hacer un piercing, vamos, un segundo agujero en el lóbulo de la oreja. Ante sus negativas tajantes, creo que llegué incluso a decirle que la »infanta Cristina lo lleva» (true story), a lo que mi madre creo que me respondió, «su madre le habrá dejado, ve y pregúntale a ella». Fíjate, como para poner de ejemplo a esta señora en estos momentos. La historia termina con una visita una tarde con una amiga, meses después, a una farmacia y agujero hecho. Luego llegó el del cartílago arriba del todo y cuando supe que había aprobado selectividad, con una amiga me hice el del cartílago de dentro (no sé si tiene nombre). La cosa es que siempre he llevado gustosamente esos pendientes, nunca, aunque pasaron de moda, me los quité y ahora…¡me gustan más si cabe! Hasta aquí el testimonio de mi vida adolescente, vamos al turrón.
Hay dos actrices que para nosotras son top en cuestión de piercing en la oreja, siempre los han llevado con estilazo, con pendientes preciosos y es que además son guapas a rabiar. Ellas han sabido siempre combinar perfectamente sus orejas cargadas de pendientes hasta en los momentos con más «glamour». Hablamos de Scarlett Johansson y Blanca Suárez.
Foto del blog de Blanca Suárez
Pero no son las únicas, las fotos inspiradoras de cómo llevar piercings en las orejas llenan la red. Aritos finos, brillantes, joyas delicadas… ¡maravilloso!
Imágenes vistas en 1 // 2 // 3 // 4 // 5 // 6 // 7 // 8 // 9
Total, que ahora vuelvo a parecer una niña de 16 años pensando en dónde me voy a hacer el próximo piercing en la oreja, eso sí, ya no le tengo que preguntar a mi madre, aunque le consultaré por si acaso. Por cierto, que hace unos días, Smoda publicó un artículo muy chulo sobre esto mismo, por si le queréis echar un ojo.
¿A vosotras os pasó lo mismo de mozas? ¿Os gustan los piercings? ¿Dónde tenéis alguno?
¡Buen miércoles y hasta mañana!
