Seguro que en 2020 habrá más de un bodorrio en la sala. Y no nos cabe duda de que ya estaréis buscando y rebuscando vuestro traje ideal. Y como a nosotras nos encanta cotillear estos festejos y sus tendencias (ya os lo desvelamos en nuestro post de vídeos de boda que no dan pereza), hoy traemos varias propuestas de vestidos de novia para decir sí quiero una y otra vez.
Por fin viernes y con ganas de fin de semana… y de fiestas como, qué te digo yo, una boda. Auxi y Rocío sí han tenido bodas este año, pero yo ninguna…¡no me lo creo! He tenido de media en los últimos años media docena y para una adicta como yo a estos saraos, estos años en blanco (nupcial… humor) son tremendos. ¡Echo de menos una boda! Invitadme por favor, con lo que me gusta a mí, lo que bailo, lo que aplaudo y lo que lloro.
Serán esas ganas de boda lo que ha hecho que este viernes me hayan entrado ganas de despedir la semana con todo un clásico: vestidos de novia lowcost, por menos de 200 € y para todas las tallas (o casi todas, que no se nos enfade nadie). No necesitan publicidad ni nos pagan un duro, pero…¡menos mal que para estas cosas existe Asos!
Empezamos por los más económicos, el presupuesto: 100€. Por menos de 100 euretes podemos encontrar vestidos que dan el pego total. Vale, no son de novia propiamente dichos, pero ¿quién lo diría? Un ramo de flores en las manos le otorga todo el realismo al look.
Vestido largo bordado de colores // vestido corto de encaje // vestido largo transparente // vestido con volante // vestido calado
El siguiente presupuesto que manejamos también se puede considerar en la categoría de vestidos de novia lowcost porque vamos a aumentarlo 100 euros más. Pero ojo, que nos hemos puesto de tope 200€ y la búsqueda nos ha salido la mar de resultona. Con vestidos para todos los gustos, cuerpos y estilos de novia. Novias sin mucho presupuesto… ¡no hay excusa!
Vestido 1 // 2 // 3 // 4 (de arriba a abajo e izquierda a derecha)
Vestido de raso // vestido volante delantero // vestido encaje // vestido de tul y tirantes // vestido volante hombros // vestido con cortes en la falda
Entonces a ver, ¿quién se casa por ahí próximamente? ¿Quién se apiada de mí y me invita a un sarao bodil? Juas, juas.
¡Buen finde y hasta el lunes!
Hace un año nos encontramos por casualidad con una ilustración que nos pareció una auténtica belleza. Además de ser un documento histórico, casi antropológico, este documento es un pastelito para cualquier amante de los blogs de bodas a la par que lectora de la revista ¡Hola! Sabemos que nos entendéis (decid que sí, por fi, que si no vamos a parecer bichos raros). La ilustración en cuestión es una creación de la joyería (de muy alta alcurnia) Vashi y recoge los 100 vestidos de novia más icónicos de la historia.
No nos digáis que no es una auténtica delicia. Nos ha dado pelusa, y también hemos querido proponer los vestidos de novia que son más icónicos para nosotras, esos que se te vienen a la cabeza nada más fantasear en cómo sería tu vestido… o áquel que hemos guardado en Pinterest, con una captura de pantalla o en plan romántico, la página de una revista doblada entre las páginas de cualquier libro.
Empezamos por los más clásicos, aquí coincidiremos muchos: Audrey y Grace, Grace y Audrey. Cada uno con su estilo, el corto de Audrey con flores en el pelo y el principesco de Grace con encaje y mucho volumen. Ambas tienen algo en común: la personalidad. Tanto en el tocado como en la forma del cuerpo de los vestidos. Los dos, pese a ser de los años 50, son fácilmente adaptables al siglo XXI.
Avanzamos algunos años, más bien algunas décadas y nos tenemos que detener en otros dos vestidos completamente diferentes y que también están entre los 100 vestidos de novias más icónicos: Kate Moss y Solange Knowles (la hermanísima de Beyoncé, que qué comerían en esa casa… vaya dos hermanas). De nuevo dos looks tan diferentes como ellas mismas. El toque bohemio de la Moss y las líneas rectas y simples de Solange. Nos podríamos poner ambos vestidos. Sin ningún problema (pese a los obvios de cómo nos quedarían, claro está).
Y terminamos nuestro particular recorrido por novias patrias, más en concreto, novias andaluzas que en los últimos años nos han llamado la atención por algo y porque sus vestidos son un punto y aparte en el bonitismo nupcial. Empezamos por el vestido de la sevillana Rocío Peralta, gracias a ese traje, conocimos el trabajo del diseñador Roberto Diz y sus libélulas. Él también hizo los vestidos de las hermanas de Rocío cuando se casaron… ¡preciosos! Completamente opuesto es el vestido de novia de la diseñadora granadina Beatriz Peñalver diseñado por ella misma. Cuando ves el vestido no puedes decir otra cosa que ¡oh-my-god! Vale, es atrevido y probablemente sería complicado de poner en cualquier cuerpo de muchacha terrícola, pero a ella le queda de infarto y hay que reconocer que es un vestidazo.
Y finalizamos con la malagueña Ana Vera (creadora de Vera Blonde), ¿quién no la conoce? Es tan guapa que da hasta coraje, pero es tan encantadora que se te acaba olvidando nada más cruzar dos palabras con ella. Su vestido de novia lo firmó el diseñador, también malagueño, Jesús Segado y es de lo más bonito y especial que hemos visto en los últimos tiempos.
Y para vosotros, ¿cuáles son los vestidos de novia más icónicos de la historia? ¿Cuál se nos ha olvidado en esta selección? ¿Vuestra novia favorita de todos los tiempos? Venga contadnos… ah, y vale decir el vuestro, eh 😉
¡Hasta mañana!
Somos unas enganchadas a Asos. Pero para nuestro bien y el de nuestra economía, somos más fans de mirar que de comprar (aunque a veces sucumbimos ante la tentación). Nos podemos pasar horas y horas buceando ensimismadas en la página entre trapitos. Y últimamente nos hemos tropezado con vestidos frente a los que hemos pensado, oye, pues esto no quedaría mal para una novia. De hecho, hace ya algún tiempo escogimos varios de ellos en este post sobre vestidos de novia low cost. Porque una cosa esta clara: hay vestidos de novios maravillosos, pero cuestan parte de nuestro hígado (y somos medio borrachinas y no nos darán demasiado por él). Así que hoy hemos hecho una selección de vestidos de Asos antes los que diríamos el sí quiero sin estar alimentándonos de pasta y arroz durante meses. Eso sí, hay que hacer un ejercicio mental de imaginárselos con el peinado, el tocado y los zapatos adecuados. ¿Probamos?
La aquí firmante no piensa casarse (aunque nunca se dice de este agua no beberé), pero algunos domingos tontos y días nublados, a una le sale la vena más clásica e imagina que si tuviera que hacerlo, sería de corto. Y con estas opciones, hasta una se puede imaginar de novia sin sentirse Sisí Emperatriz. Estos vestidos (imaginadlo con un tocado de flores) son ideales para esas novias que no quieren parecer princesas o incluso para la ceremonia civil en juzgados y ayuntamientos o incluso para ponerse cómoda en medio de la fiesta y dejar boquiabiertos a los invitados con tu cambio de look. También son aptos para invitadas que quieren marcarse un Sara Carbonero y ganarse el odio de la novia de por vida.
1 / 2 / 3 / 4 / 5 / 6 / 7 / 8 /
Y si ya queremos ir de largo, opciones no faltan y todas a muy buen precio (el más caro cuesta 252 euros). De hecho, estos vestidos son una buena opción para modificarlos y hacer el que tienes en tu cabeza y no encuentras en ningún lado.
A veces dar el sí quiero cuesta menos de lo que creemos y con el vestido adecuado (aunque sea de Asos), todo es más fácil.
¡Feliz martes!
P.D. Asos no ha pagado este post, aunque si nos está leyendo, decidle que nos dejamos sobornar con tarjetas descuento 🙂
Sí, nosotras también hemos sufrido la fiebre de Juego de Tronos, que para bien o para mal, ya ha terminado. A modo de despedida, queríamos hacer un homenaje, sin spoilers, a lo más bonitista de la serie: el armario de Khaleesi, también conocida como Daenerys.
Lo cierto es que si tuviésemos que quedarnos con algún armario de poniente sería el suyo, sobre todo los de su temporada como reina de Meereen, donde la madre de los dragones lució unos vestidos, que con su toque, quedarían fetén en cualquier buen sarao y hasta podrían ser trajes de novia. Novias a lo Khaleesi.
Sea por inspiración khaleesiana o no, hemos encontrado algunos ejemplos para novias que no quieren ser princesas, quieren ser Khaleesis.
El primer ejemplo de la diseñadora española Alicia Rueda, de la que ya os hablamos en este post. Es de hace un par de colecciones, pero oye, Daenerys puede que no pase de moda. La segunda opción la firma la mismísima Stella McCartney
Estas dos opciones (izquierda / derecha) de Pronovias también huelen a fuego de dragón. Aún así tampoco son para sentirse disfrazada, que hemos visto cada fantasía de boda inspirada en Juego de Tronos en Pinterest que es para hacer otro post. Controlemos las pasiones, por favor.
Los primeros ejemplos podrían haberse colado en Poniente y nadie se habría dado cuenta. Con estos dos últimos ejemplos, nos tomamos algunas licencias. Una Khaleesi con los pantalones bien puestos y otra con un toque romántico y bien de brilli brilli.
Y no puede faltar el peinado, cuántas más trenzas y pelazo mejor. El tinte no hace falta. Sigue este tutorial.
¿Qué te parece? ¿Te gusta el rollo madre de dragones para decir el sí quiero?
P.D. Ha sido tremendamente difícil no meter ningún spoiler en este post. Suspiro.
