Hace unas semanas ya os hablamos de bodas hipster y hoy queremos hacerlo de la decoración de sus casas. Porque hay ciertas cosas que no pueden faltar en el hogar de un auténtico moderno, aquí os presentamos unas cuantas claves.
Comenzamos por la habitación. En los dormitorios hipster predomina el color blanco y nunca puede faltar algún objeto comprado en un rastro o mercadillo de segunda mano. Lámparas, cuadros, marcos antiguos, sillas, botellas viejas… cualquier detalle vintage es imprescindible. Además, el toque de las revistas de moda, decoración o arte, apiladas en el suelo, es otra señal de modernidad. Por no hablar de los burros de ropa o armarios que quedan a la vista…
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En los workspaces o despachos hipster podrás encontrar láminas antiguas o postales, letras de madera o cartón, lámparas o flexos industriales y, por supuesto, un mac, el ordenador de los modernos.
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En cuanto a un salón hipster, debe tener un sofá de piel (cuanto más viejo, mejor), libros de fotografía, arte, diseño…; cuernos colgados en las paredes, cámaras analógicas y un tocadiscos, porque todo moderno sabe que la buena música suena mejor en vinilo ;).
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Otro detalle importante en la casa de un hipster es tener una bicicleta. Ya sea colgada, en el pasillo o en mitad del salón, la bicicleta se convierte en un elemento decorativo fundamental. Y en algunas ocasiones hay hasta quien la usa 😉
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¿Qué os ha parecido? ¿No os entran ganas de llenar vuestra casa de detalles hipster? ¡A nosotras nos encanta!
¡Feliz finde!