La chaqueta vaquera: la prenda de entretiempo que sobrevivirá siempre

Creo que a lo largo de mi vida solo he tenido tres chaquetas vaqueras (y aún muero por dar con la primera que tuve, a saber dónde estará, una pieza vintage en toda regla). Me recuerdo toda mi infancia con una que me quedaba gigante y que me harté de llenar de pins que fui coleccionando los años 90. Luego tuve otra que «tuneé», a comienzos del milenio, con un parche rockabilly que compré en el primer viaje a Madrid que hice con mis amigas. Cuando volví a Málaga me creía lo más (pobre de mí). Y ahora tengo una de Zara que me regaló mi madre hace unos años y que pervive temporada tras temporada sin importarle(me) el año en el que está y las tendencias que se llevan en ese momento. Sí amiguis, la cazadora vaquera es la prenda estrella del entretiempo (que ni frío, ni calor, ni todo lo contrario) y nos acabará sobreviviendo a todos.

Más o menos tuneadas, con más o menos abalorios o más o menos ajustadas a la talla… la chaqueta vaquera siempre queda bien, siempre favorece y va con todos los estilos. Hemos hecho un concienzudo trabajo de investigación para dar con esta conclusión, ojo, y para muestra… este collage.

Vía 1 // 2 // 3 // 4 // 5 // 6 

Y por si aún quedaba alguna duda… por aquí hay más.

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Así que ya sabes, la cazadora o chaqueta vaquera es tu aliada en estos tiempos de fríos y calores que nos tocan hasta que llegue el verano total… Si no tienes, es fácil hacerte con una y si no… siempre puedes rescatar la de tu infancia/adolescencia. ¡La cazadora eterna!

¿Os gustan? ¿ Las lleváis normalmente?

Besotes y nos vemos mañana por aquí.

Mensajes «body possitive» para irnos de vacaciones a lo grande

Lo confieso: hace varios meses que no me subo a la báscula. Hasta hace un tiempo lo hacía cada semana, no porque estuviese haciendo dieta ni nada parecido, sino por controlar si ganaba o perdía algo de peso. Cada gramo perdido era una victoria y por lo tanto, cada gramo ganado me daba el fin de semana (me pesaba los viernes). Y un día sin más, dejé de hacerlo. Ojo. Me gustaría aclarar que no es nuestra intención, nunca, incitar a la falta de control en nuestra salud y que apoyaremos siempre comer bien, sano, variado y hacer ejercicio. La obesidad es una enfermedad y como tal debemos tratarla y siempre animaremos a que, si algo de tu cuerpo afecta a tu salud física o mental, trates de cambiarlo.

Con este post no queremos hacer apología de nada (ni de los kilos ni de los «cuerpos 10»), solo queremos, ahora que se acerca el verano peligrosamente, animaros a que os reconciliéis con vosotras (y vosotros) mismas. Nada más y nada menos. Por eso hoy queremos compartir mensajes body possitive para irnos de vacaciones de Semana Santa a lo grande y sin complejos.

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Cuántas veces hemos oído o nosotras mismas hemos dicho eso de: odio mis piernas, tengo mucha celulitis, qué bajita soy, es que no tengo pecho para eso, esa camiseta me queda fatal, estoy horrible, esto me hace gorda, salgo fatal en la foto, odio mi pelo, vaya brazo tengo, esto no me lo pongo… y así día tras día. Estamos mucho más acostumbradas entre nosotras (y hablo en femenino) a escuchar estas frases y darlas por normal que quizá un «qué guapa salgo en esa foto», «qué bien me queda ese vestido». Pensadlo, si escuchamos estas frases en cualquier conversación… nos llaman mucho más la atención que las anteriores. ¿Por qué creéis que ocurre?

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Aunque queremos cambiar de talla, estar más sanas, alimentarnos y mejor y tener los brazos más fuertes… ¿tan complicado es mirarse a un espejo y verse algo «bonito»?

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Viva la diferencia, viva la verdura y el brócoli, pero que viva también las torrijas y el deporte. Viva ponerse en bikini sin mirarse el espejo con recelo, viva el deporte y la vida saludable, viva comer mejor y reírse. Viva decirse cosas bonitas, verse bien en las fotos y dejar de señalar nuestros defectos. Viva decirle a la de enfrente que la camiseta le queda guay, viva enseñar brazos y piernas en cuanto empiecen a subir las temperaturas, viva ser positivas y cambiar todo aquello que queramos.

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Viva mirarse el espejo y recordarse…»oye, pues tampoco estoy tan mal». Claro que no lo estás… ¡y mucho mejor que vas a estar!

Felices vacaciones de Semana Santa, ¡nos encontramos a la vuelta!

Ahora nos toca a nosotras: así es el verano bonitista

Ya era hora. No es tiempo de estar viendo cosas bonitas que poder vivir, es hora de vivirlas. El verano o su primo hermano, las vacaciones, por fin han llegado. Al menos las de estar aquí al pie del cañón día a día, llenando vuestra pantalla de cosas bonitas. Nos encanta compartir el resto del año con los que, casi aún no sabemos por qué, visitáis este blog. Pero ahora es el momento de centrarnos en los que tenemos al lado, y no en lo que hay detrás de una pantalla.

Nos vamos de vacaciones bonitistas y después de pasarnos todo el mes de julio repasando el verano bonitista de nuestras amigas, no sé nos ocurría mejor forma de bajar el telón que compartiendo cómo es el verano bonitista de las tres patas para un banco que formamos este blog.

verano bonitista

1: Un recuerdo.
Celia: De pequeña, el olor a tierra mojada cuando nos levantábamos por la mañana y salíamos mis padres mi hermana y yo de la tienda de campaña del camping al que fuimos un par de veranos. De jovenzuela, las noches por Conil con las amigas. Más reciente me quedo con el primer viaje en verano que hice con Mr. Bonitisto y la puesta de sol en el Cabo de San Vicente.
Rocío: Los veranos en Adra.
Auxi: Tengo muchos de recuerdos de verano, pero si solo hay que elegir uno, me quedo con las moragas, esa celebración malagueña playera, y en especial, la moraga del amor (aunque comiese tierra intentando ser Iker Casillas).

2: Una canción.
Celia: Si contesta la chunga que llevo dentro: Felices los 4. Pero si me pongo «fina», La revolución sexual de La Casa Azul (el verano del amor…).
Rocío: Des-pa-ci-to.
Auxi: La banda sonora del verano la marca La Casa Azul y en especial, La Revolución Sexual.

3: Un complemento.
Celia: Pendientes y si son con flecos y pompones mejor!
Rocío: El bolso de madera (regalo de la suegri de hace 30 años).
Auxi: Un capazo de mimbre o un bolso grande de rafia como este de Lucía Be, donde te quepa todo lo necesario para disfrutar de un buen día de verano.

4: Un deseo / plan de verano por hacer.
Celia: Alquilarme una casa durante un mes en Zahara de los Atunes y pasarme todo el día en bikini.
Rocío: Pegarme un viajazo a Argentina.
Auxi: Estar en una casa sin reloj, en la playa, con muchos amigos y que la rutina sea compartir comida, siestas y confesiones al anochecer.

5: El mejor plan / Plan favorito.
Celia: Y el más realista…subirme a la terraza de mi casa con una cerve y un cuenco con aceitunas.
Rocío y Auxi: Los reencuentros en Málaga. Volver a casa es sinónimo de verano.

verano bonitista

6. Tu rincón secreto / paraíso.
Celia: Las playas de Zahara y la playa de Beliche en el Algarve.
Rocío: Los baños del Carmen en Málaga. Tomarte una cerveza con esas vistas no tiene precio.
Auxi: Cualquier rincón de El Palo, desde la peña del Barça a sus playas. El barrio más auténtico de Málaga me hace sentir en casa.

7. El mejor manjar / receta.
Celia: Los espetos sin dudarlo.
Rocío: Conchas finas y espetos. Difícil decidirse.
Auxi: Espetos y si puede ser con una cañita y un poco de gazpacho o porra antequerana, ya es felicidad en vena.

8. Un libro para este verano.
Celia: El que me estoy leyendo este verano: Patria.
Rocío: Patria (lo tengo pendiente para este verano, pero me han dicho que recomendadísimo).
Auxi: Aunque no lo leí en verano, creo que Patria es ideal para compartirlo y vivirlo en estos días.

9. Tu helado favorito.
Celia: El de turrón.
Rocío: Chocolate y vainilla, un clásico.
Auxi: ¿Sólo uno? Venga va, el blanco y negro de Casa Mira en Málaga, granizada de café con el helado que elijas (yo elijo el de turrón).

10: Una película / Serie.
Celia: Sexo en Nueva York. todos los veranos durante mi juventud veía la serie y este verano he vuelto a retomarla porque en septiembre me voyyyyy.
Rocío: Juego de tronos, los lunes!!!
Auxi: Si tuviera que decir una peli: Dirty Dancing, esas vacaciones con tus padres que nunca tuviste, y como serie para pasar tardes de siesta y más: Master of None, me tiene completamente enamorada.

Ya sabéis cómo es nuestro verano bonitista e ideal (soñar es gratis), ahora sólo nos queda ajustarnos a la realidad y disfrutar lo que nos toca (que nos lo hemos ganado) y ser felices, que eso sí que es bonitista 100%. ¡Feliz verano! ¡Nos vemos en septiembre!

El verano bonitista de… Una mamá motera

El verano bonitista de MAMAMOTERA

Escribimos este post con un sabor agridulce. Contentas porque se acercan las vacaciones y por fin cogeremos algo de aire después de un año muy intenso pero con cierta congoja, ya que a partir de cierta edad el que se repitan rutinas provoca un tanto de melancolía. Este verano, nos ha encantado conocer un poco más (y compartirlo con los lectores bonitistas, con vosotros) a nuestras bloguers o instagramers favoritas. Tipas con las que conectamos, con las que nos reímos y con las que disfrutamos en este mundo, muchas veces, tan extraño de entender.

Aún seguimos flipando cuando vemos comentarios hirientes, fuera de lugar o insultos (llámalo haters o llámalo gente «lerder», así sin más). Será que nosotras somos eso que han denominado «xennials» y cuando éramos mozas Internet no era más que un chat de Terra y un correo en Yahoo.

Pero vamos al turrón (si es en helado, mucho mejor) porque hoy traemos la última entrega de «El verano bonitista de…» que no podía tener mejor protagonista en su despedida. Redoble de tambores…trrrrr trrrr María Regueiro o lo que es lo mismo: Una mamá motera.

Nos cruzamos un buen día con su blog, cuando aún no había llegado Alberto, y ya nos quedamos para siempre. En Navidad este mismo año, nos «desvirtualizamos» en Madrid y comprobamos que María es de esas «tías» con una sonrisa de verdad de la buena.

¿Quieres conocer cómo es su verano bonitista? Pues quédate por aquí y descúbrelo en un pis pas.

El verano bonitista de MAMAMOTERA

Un recuerdo. La casita de Vejer de la Frontera donde nos enteramos de que Julia estaba en camino.

Una canción. Qué difícil elegir solo una! Plage de Crystal Fighters.

Un complemento. Zapatos, sin duda.

Un deseo / plan de verano por hacer. Viajar a Grecia

El mejor plan / Plan favorito. Una comida con familia o amigos que se alarga.

Tu rincón secreto / paraíso. La playa de Vega, en Asturias.

El mejor manjar / receta. En verano, el gazpacho.

Un libro. Cualquiera de Murakami

Tu helado favorito. Strawberrys & Cream, de Haagen Dazs

Una película / Serie. Forrest Gump, no me cansaré de verla.

Si no conoces a María, no te la pierdas este verano y sigue las fotos adorables de sus moteritos, sus planes y su buen gusto en Instagram. Y si te gusta la decoración… no te pierdas tampoco Decosseker.

Feliz miércoles y nos vemos por aquí el viernes, familia.

Láminas veraniegas para nuestras paredes

El verano ha llegado también a nuestras casas. Y lo hace en forma de láminas. Hemos buscado las más coloridas y con diseños veraniegos y pensamos atiborrar nuestras paredes con ellas. Las hemos encontrado con motivos de plantas tropicales, frutales, de helados… ¡Y muchas de ellas son gratuitas!

Nos encanta como queda combinar varias en la pared, a modo de exposición. Os dejamos un poco de inspiración y, por supuesto, los enlaces para conseguirlas:

Disponibles en ElGreco

Acuarelas de helados disponibles aquí.

Las podéis encontrar en: hojas / estrellas de mar

láminas tropicales

Láminas para descargar en: 1 / 2 / 3 / 4 / 5 / 6

láminas hojas

Imprimibles en: 1 / 2 / 3 / 4 / 5

¿Qué os parecen? ¿Os animáis a dar un toque veraniego a vuestras paredes?

¡Feliz lunes!