Llega el verano, la jornada intensiva, las tardes de playa y piscina y las ganas de leer. Ahora que por fin tenemos tiempo. Libros que nos acompañan en estaciones, aeropuertos y bajo la sombrilla. O incluso en la cama cuando el calor no nos deje dormir. Abrimos este post cultureta con cinco libros que ya nos hemos leído y os recomendamos, y otros cinco que aún no, pero a los que tenemos muchas ganas.
No sé si seré yo, pero llega el calor y aunque no se me quitan las ganas de cerrar el piquito (que falta me hace), prefiero comer a pequeños bocados que con platos gigantes. Una de mis grandes aficiones, quién me ha visto y quién me ve, son los patés y cualquier cosa que se pueda untar sobre el pan.
Hoy respetamos esta afición, pero damos un pequeño giro con cinco recetas de patés vegetales, ideales para estos piscolabis veraniegos.
Aunque el ingrediente principal de esta receta son las lentejas, también incluye tomate seco, que nos chifla. Puede recordar un poco a un hummus, pero tiene pintaza.
¡Hoy es mi cumple! Sí, otra vez. Antes de empezar a escribir este post, he releído los que he escrito llegado este momento en otras ocasiones. Me pongo en modo intensa cuando cumplo años, pero este año no. Son 35. La mitad de una vida (muy bien vivida, oye) y en este post voy a dejar la nostalgia a un lado para daros la receta de las cosas que me gusta hacer el día de mi cumpleaños.
Y lo he llamado receta, porque varias de las cosas que más me gusta hacer el día de mi cumple es comer. Una que es una gorda mental (y no tan mental). Así, que hagan apetito.
Tomarme una michelada y unos tacos para comer. Soy una auténtica fan de la michelada. Sé que es la típica bebida que amas u odias. Mi favorita en Madrid la ponen en Taquería Mi Ciudad. Un teletransporte directo a México en sólo un sorbo. Si ya de paso cae un taco de mole, pues ya soy feliz.
Comerme un helado. Mucho mejor que una tarta, dónde va a parar. Un rico helado para que en los 35 siga siendo y estando tan fresca como siempre.
Escuchar y cantar mis canciones favoritas. No va a faltar en mi playlist mucha La Casa Azul, que es la mejor solución para frenar la bajona.
Releer el poema Cumpleaños de Ángel González. Un clásico en estas fechas. Ojo, que ya me ha salido el lado intensito.
Yo lo noto: cómo me voy volviendo menos cierto, confuso, disolviéndome en aire cotidiano, burdo jirón de mí, deshilachado y roto por los puños.
Yo comprendo: he vivido un año más, y eso es muy duro. ¡Mover el corazón todos los días casi cien veces por minuto!
Para vivir un año es necesario morirse muchas veces mucho.
Cenar con mis amigas. Parece un plan simple, pero según te haces mayor, quedar entresemana no siempre es tan fácil y estas quedadas son las mejores. Si de postre cae un amaretto o un Moscow Mule, yo ya.
Esta es mi receta para un buen cumpleaños y hoy la pienso aplicar al pie de la nota.
Si eres fan de Juego de Tronos es probable que Croacia esté en tu lista de próximos viajes. Si no lo eres, es posible que también esté después de haberte tragado más de una foto en Instagram de sus playas de aguas azul celeste, sus ciudades sacadas de un viaje en el tiempo y su increíble naturaleza. Sea como sea es un país maravilloso con el que no te equivocarás. Hoy hacemos un viaje ilustrado gracias a Mateja Kovac.
Sí, yo también lo pensaba. El tofu no sabe a nada. Cuando pensabas que no había nada más insípido que el queso fresco 0% grasa, descubriste el tofu y ganó la partida. Sí, el tofu no sabe a nada. Igual que otros alimentos como la pasta ó el arroz tampoco saben a nada si no los cocinamos como debe ser. Por eso, hoy os traemos cinco recetas para aprender a saborear el tofu.